miércoles, 28 de abril de 2010

Estoy aquí



¡Eh, mira!
no te digo nada,
pero ¡eh!

No tengo nada terminado
que mostrarte
estoy a medias,
no tengo nada que decirte
nada definido
... o eso creo,
ninguna certeza.
Pero ¡eh!
¡estoy aquí!
sin cerrarlo todo con palabras
sin cerrarme
¡Estoy aquí!

Toma
mi presencia,
al cuerno física,
mi atención,
toma
¡Estoy aquí!

La caricia que moja en té mi tecnología
caricia-magdalena
la palabra que tomas aun sin estar seguro
palabra- puente,
sin ellas,
no voy atrás
ni siquiera me paralizo,
sin ellas,
simplemente hay nada
y vengo y te digo ¡eh!
y la piel se me eriza
como si hubiera estado muerta.

Por eso,
aunque se que no es verdad,
digo que por fin
ya no hay que protegerse antes de salir
y la calle me recibe acogedora
como un gran sofá para ver la tele sin verla.
Y el globo blanco
de mi inocencia
desde el cielo se ríe
del toro solo
que en la ribera
olvida
el olor de herramientas y de manos.

martes, 13 de abril de 2010

Mientras...



Huelo
la corriente de aire
que dejó
tu paso
al irte.

Saboreo
el olor a limpio
del azote
purificador
de tus emes, tus erres, tus aes.

Acaricio
mi piel
como las ruedas se deslizan en la noche
por el asfalto mojado,

Escucho
cada uno de tus puntos suspensivos.

Aguanto estoica
los codazos en mi estómago
de la contención
cuando me enfocas
desde el  agujero que eres
-imposible no arrastrame a él-.

Resisto patética
la pared
que impide el paso a mis ojos cuando
el aire
entre los dos
se revela
poderosamente desnudo.

Y tarareo
mi nombre
en las intermitencias del espacio
hasta quitarme el frío.

El trasiego de la calle me despertará,
el trasiego de la calle me despertará,
para que
mientras…
también,
le haga un poco de caso.