jueves, 13 de agosto de 2015

Perfil del psicópata-perverso: otra versión de la violencia machista. Guía para su identificación.

Esta guía está realizada en base a las investigaciones de Robert Hare, uno de los mayores expertos sobre este síndrome -creador del Psychopathy Checklist, el test utilizado por los profesionales de todo el mundo para el diagnóstico de la psicopatía-.
Apático
Ausencia de empatía real. Cosifica a las mujeres, no las trata como a personas. Su empatía es utilitaria, sólo reconoce las necesidades del otro en la medida que sirvan a su propio beneficio o morbosidad. Lo identificarás por su aversión a mantener conversaciones profundas sobre sus propios sentimientos o debilidades, a menos que sirva para tener el control sobre la situación o deteriorar a la otra persona. Pero por lo general, sus emociones suelen ser superficiales, banales y muestran una total ausencia de remordimientos o culpa, aun cuando los descubren.
Depredador compulsivo
Busca el de placer sin límites y la satisfacción de deseos y necesidades a expensas de los otros. El control, castigo y dominio sobre la mujer le hace sentir placer: es sádico. El perverso psicopático es un depredador de apetito insaciable y tendencia hacia el sadismo. Incapaz de tener en cuenta las necesidades de los demás, y por tanto, sin límites, experimenta el impulso constante de satisfacer sus propios deseos, lo que deviene en una constante decepción, insatisfacción y vuelta a empezar inacabable, en cuanto que la dinámica de su deseo es inagotable. Y es que el psicópata no acepta la falta, o la frustración. Es como un niño consentido, absorto en sus propias necesidades, que demanda que le sacien inmediatamente (Hare:49). Por eso cambian constantemente de planes o de gente, simplemente por impulso, porque se aburren o para evitar el control.
Egocéntrico
Sus relaciones se establecen únicamente sobre sus condiciones e intereses y rechazan el diálogo, las opiniones de los demás y dar explicaciones. Y sin embargo, aunque él no brinda ningún amor verdadero, les encanta ser admirados y se regodean cuando los demás los adulan y es capaz de inspirar amor a veces hasta fanático en los demás (Hare: 36). Dentro de un contexto de seguridad, se muestran arrogantes y fanfarrones, seguros de sí mismos, dogmáticos, dominantes y chulos, lo que algunas personas puede resultar carismático y atrayente.
Controlador y vanidoso
Cuida su imagen meticulosamente y sus estrategias de actuación para gustar y mantenerse indemne ante la opinión pública. Un rasgo que define al perverso psicopático es el hiper-control de sus actuaciones. Por lo que siempre buscará relacionarse con personas sobre las que posee un determinado control, bien porque guarda también algún secreto sobre ellas o porque son emocionalmente débiles por cualquier motivo. El perverso psicopático también suele buscar pareja o amistad con una persona de imagen social impoluta que mantiene con el objetivo de favorecer la suya propia. Su necesidad de valoración, les hace presentar a veces una imagen de sí mismo de anti-héroe deprimido, necesitado de un amor intenso capaz de superar sus barreras, que los salve. Les gusta verse y mostrarse como un lobo solitario, cuyo misterio y contención esconde un ser sensible y profundo, aunque en realidad dentro de él no haya nada más que vacío y codicia
Mentiroso y manipulador
Miente con toda naturalidad y cuando se le descubre o se siente amenazado manipula al otro para hacerlo sentir culpable. Por eso, no se lleven  engaño, este tipo el perverso puede resultar cuando quiere encantador y gusta de dar la impresión de poseer las cualidades humanas más nobles. Hace "amigos" fácilmente y es muy manipulador, con su habilidad de palabras para salirse con la suya de cualquier apuro.
Colérico y violento 
Puede que no maltrate o mate físicamente, que incluso no le guste gritar, porque, de hecho, suele ser muy comedido en su actividad pública, pero su tolerancia a la frustración es igual a cero (Hare: 50). Si su voluntad es quebrantada o se ofenden –lo que ocurre con suma facilidad- actúan con repentina violencia, amenazas y ataque verbal erradicando radical y cruelmente el foco de su frustración, sin miramientos y usando todos los medios a su alcance para ello.
Por último, recordad que la desviación perversa psicopática es un trastorno o desviación de la conducta, no una enfermedad, de perfil mayoritariamente masculino (más de un 80% de los casos son hombres). Clínicamente no es considerado un psicótico o enfermo mental, por lo que este motivo no puede alegarse como atenuante de su condena. Actúa de manera consciente y calculadora y, además, el perverso no tiene cura, el tratamiento es ineficaz ya que se siente magníficamente bien consigo mismo. Lo único que puede limitarlo es el temor a ser descubierto y el escarnio público. La imagen que da de sí mismo no es la real. Usa su posición o autoridad social y las debilidades emocionales para crear una red de víctimas. Y sobre todo: los casos de asesinos que saltan a la opinión pública no tienen por qué responder al perfil del perverso psicopático, y si es así, son excepcionales o solo la punta del iceberg de un trastorno que suele mantener su actividad en la esfera privada y de forma oculta.


lunes, 29 de junio de 2015

Fa sostenido




Único movimiento de Mozart escrito en la tonalidad de fa sostenido menor



martes, 14 de abril de 2015

Las personas felices




Las personas felices
nunca se contentan con poco.
Eso es una mentira perversa.

Las personas felices
corren hacia lo que desean
y el camino se abre ante ellas con facilidad
porque son honestas.

Pero las personas felices,
además,
permanecen siendo honestas
a pesar de lo que va pasando.
Y eso siempre es difícil.

Como la obra
en la que profundiza el artista
a lo largo de su vida.
Así es su deseo.

Cada vez que las miras,
el poso de la felicidad en sus caras
es más sólido y consistente,
hasta alcanzar un dibujo nítido
de la felicidad
que las rejuvenece.

Como la nota limpia
que corre en las aguas del río
que siempre es el mismo
y siempre es crío.



martes, 7 de abril de 2015

No sabíamos qué hacer con ella




Era tanto el deseo de verle
tanto el deseo almacenado
el deseo domado
Todos esos días de mientras tanto
Y los preparativos, los nervios
lo que llevo y lo que me llevo.
Y en el tren, pensar
en lo que diré al verle
Iré corriendo y saltaré a abrazarle
y me lo comeré a besos
lloraré besándole
y lloraba pensándolo.

Pero luego no.
Nunca era así.
El encuentro era torpe
y contenido
Su voz era seria
y podía con la mía
Sus besos eran rápidos
nuestras narices chocaban.
Y todo lo no dicho y lo no hecho y el deseo, el deseo
de golpe,
era un tapón inmenso
en mi garganta.

Justo un momento antes sí.
Mientras él esperaba,
su mirada salía al galope
hacia aquel punto de fuga
en que se pierden las vías
y asaltaba con furia el vagón
y me arrancaba con sus brazos
de esa espera
tan injusta.

Sabía perfectamente
lo que haría al verme
Y yo lo sabía perfectamente.
Hasta que nos encontrábamos.

Éramos jóvenes y tímidos
Y la realidad era un titán indomable.
No sabíamos qué hacer con ella.



sábado, 28 de marzo de 2015

Fantasme




Te enorgulleces de no buscar nada ni a nadie
te gusta decirlo, presentarte así.

Sientes especial cariño por alguna imagen,
tanto,
que podrías toparte con el original y no identificarlo.
Cosa de la beta-amiloide, dicen,
que se carga las sinapsis
 y lo agujerea todo
                  de abismos
"entre la vida que tenemos
y la vida mejor que podríamos haber tenido”.

El original asistiría a la patética escena
en la que le hablas sobre él en tercera persona.
Mirándolo como a la tele
como al informativo
cuando hablan de aquel desastre en Tanzania.

Desde esa cómoda distancia.

El original te miraría como se mira al niño
de la Vida es bella
de la que no quiere despertarte
aferrado a la dosis justa de placer cordial
que permite tu cuerpo infante.

Ya no hay nada salvaje en ti.
Gustas por lo que has podido acumular.
Por lo que el miedo ha ido degenerando en ti
tus inmuebles, tu aparente estabilidad, laboral, sentimental o lo que sea;
tus manías
y tus fantásticas colecciones de lo que sea.

También gusta que digas no importarte nada de eso.
A ellos también les gusta tu imagen
que les muestra todo lo que no tienen.  
La prefieren a ti.
A ese tan vulnerable y falto que eres.
Tampoco ellos viven de verdad.

Pero a ti te vale

Porque no soportarías a nadie

que amase tu original.


martes, 24 de marzo de 2015

Mi hogar

















En seguida estaré allí
y veré correr la lluvia tras el cristal
al calor de un lugar que es mi santuario.

Oh, Patronus,
Oh, Patronus,
mi hogar es una catedral sagrada
donde el silencio crepita
y sus techos altísimos
se estiran hasta tocar lo imperceptible.

El sol tintinea
flotando en el aire
dorado
jugando con cada sombra
sublimada.

Oh, Patronus,
La belleza es mi redentor

el punto de ebullición
en este crisol
sin tiempo
donde el alma refulge.




domingo, 15 de marzo de 2015

Las amas de casa hablan de política


Era la mesa de un bar de una noche de sábado y un grupo de mujeres que rondaban los sesenta tomaban cervezas y mejillones, a la salida de una reunión por el día de la Mujer. Mujeres de mi pueblo que nunca han tenido voz aunque sí voto y se han dado cuenta de ello. No querían estar en casa con sus maridos. No querían estar en casa viendo una serie, un programa o una película. No querían estar en casa organizando la comida familiar de mañana. No querían estar adormilándose en el sofá obligadas por una pastilla y el rumor de la tele encendida. No querían estar en casa repensando el día lo suficiente para acobardarse de cara al siguiente. Querían estar allí, en aquella mesa de bar, junto a sus compañeras, hablando exclusivamente de política durante toda la noche. Y sus ojos no dejaron de brillar en ningún momento y su voz no dejó de sonar decidida y clara durante más de tres horas. Y no querían irse de allí.
Esas mujeres nunca se han dedicado antes a la política. Son tímidas. Pero cuando hablan, lo cuadran todo. Nos cuadran a todos. Tienen una fuerza impermeable a lo superfluo, a todo lo que les aburre, porque son muchos años ya. Tienen la mirada brillante y sabia y una placidez en la cara que me recuerda a alguna mujer mayor muy querida para mi que siempre tenía las mejillas encendidas y que ya no está. Me imagino ahora que esa mujer podría estar en esa escena también, comiendo bravas y mejillones. Tímida y silenciosa, de repente, llena de coraje, diría sonriendo, casi sin mirar, casi ruborizada:  “¡claro que sí!”. Y ese “claro que sí” sería la fuerza, sería el impulso que sujetara las palabras que denuncian lo que ya no quieren, las palabras que hablan de hacerse presentes, de actuar, de empoderarse. Sería el impulso que nos sujetara a todas.

Por estas y aquellas mujeres fuertes…


Regalos


De izquierda a derecha: David, Andrea, Sara, Estela, Lidia y Fran

Alumn@s que te tapan los ojos antes de entrar a clase y cuando los abres te han traído una tarta casera de tus favoritas, platos de plástico, cola y gominolas... Y la riquísima tarta, y la cola y la música que Fran ha puesto en YouTube, les hace hablarme de las cosas que más les importan que, por cierto, no son las notas (que no han sido muy buenas...) y, de ahí, me hablan de "La Insoportable levedad del ser", fíjate tú..., que algunas se han leído de pé a pa y recuerdan frases enteras... y te dicen que, definitivamente, eres Teresa...

Poesía


Lo uno para soportar lo otro...

jueves, 15 de enero de 2015

Triste omnisciente



  
Únicamente los niños saben lo que buscan. Pierden el tiempo con una muñeca de trapo que viene a ser lo más importante para ellos y si se la quitan, lloran...
                                                                         Saint-Exupéry




Pasas la vida esforzándote en buscar miles de excusas para no hacerlo
investigas sus antecedentes
sus por qués,
su composición escrupulosa y mínima
su mecanismo
sus afecciones
sus procesos y extensiones
sus facetas y cambios
sus ventajas y sus crisis.

Buscas todos los argumentos  posibles
que apoyen su valor,
los del sentido común
los estéticos
los científicos
y hasta los tecnológicos.

Lo miras, lo lees, lo hablas, lo escribes, lo analizas, lo relacionas
Lo compones en puzzles de miles de piezas
durante miles y miles de días...
Lo merodeas obsesivamente hasta envolverlo en un inexpugnable pedestal.

Puedes incluso llegar a crear en su nombre el gran paradigma de los paradigmas
para que no quede grieta alguna de su incuestionabilidad
TODO
Todo lo necesario

para no hacerlo.

Y mientras tanto...

Mientras tanto,
lo innombrable, lo intangible, lo incalculable

lo inocente...

juega

Oigo su risa por todas partes...








viernes, 9 de enero de 2015

Mar blanco


He quedado de pie ante tu espacio
como una mayúscula sangrada
como una de esas líneas mínimas sobre un lienzo oriental

No sé qué viene a continuación.

Mañana...
lo llenaré de acciones
de caminos hacia arriba
(lloro)
Mañana.

Pero hoy
déjame detenerme y contemplar
este inmenso blanco traslúcido que se extiende a ras de mi
tan lleno
como un mar de espuma blanca del que broto.