viernes, 21 de septiembre de 2018

El regreso de los centauros

Todo es santo, todo es santo. No hay nada natural en la naturaleza, no lo olvides. Cuando la naturaleza te parezca natural todo terminará. Y empezará algo distinto”. Así se expresa el centauro Quirón en la escena inicial de Medea, la película de Pier Paolo Pasolini. Sobre su grupa hay sentado un niño de tres años que lo escucha embobado. Este niño es Jasón, el héroe que de adulto partirá con los argonautas en busca del vellocino de oro. Quirón se ocupa de él hasta que esté en condiciones de reclamar el trono de Yolco, que le pertenece por herencia. Y en esta escena le escuchamos hablar de ese mundo antiguo en que viven, un mundo donde cada árbol, cada fuente es la morada de un dios, pues tierra y cielo, realidad y sueño aún permanecen unidos.... (Seguir leyendo). (G. Martín Garzo)



Final de Dublineses [Los muertos] (James Joice, 1914/ John Huston, 1987):




No hay comentarios:

Publicar un comentario